Joseph Jagger, el ingeniero textil que cambió la ruleta para siempre

A lo largo de la historia del casino, siempre encontraremos algunos personajes que, de una u otra forma, cambiaron la historia del juego para siempre. Y es que todos nos hemos hecho preguntas sobre este mundo, las cuales van desde las fichas de juego o cómo ganar en máquinas tragamonedas, pero también hay otras anécdotas muy curiosas.

Una de las historias más curiosas fue la de Joseph Hobson Jagger, un ingeniero que estudió los números de la ruleta para salir victorioso.

Originario de Yorkshire, este empresario inglés estaba adentrado en la industria textil, en donde pasaba sus días y logró hacerse de un nombre como un importante hombre de negocios en el siglo XIX.

Fue ahí donde orquestó un golpe histórico al aprovechar sus conocimientos matemáticos y darle seguimiento a una investigación. Su gran cambio se dio en la ruleta, en una jugada bastante cuestionable, pero dentro del marco de la legalidad, pues no fue en contra de las reglas de este juego.

Se podría decir que fue orillado ante una complicada situación familiar, en la que tenía que mantener a una familia de cuatro hijos y con una empresa al punto de la bancarrota, por lo que su posición complicada lo orillo a dar un golpe que le diera una victoria segura.

En su industria textil, Jagger trabajó con máquinas de costura que funcionaban mediante ruedas giratorias, similares a las de las ruletas. Joseph conocía bastante bien el funcionamiento de su maquinaria, incluso el momento en el que iban a funcionar.

Normalmente él era el que las reparaba cuando se paraban, lo cual hace que nazcan las teorías del surgimiento de su plan. A mediados de la década de 1870, su hijo partió a Montecarlo con dinero prestado, en busca de un futuro mejor. La coartada perfecta del padre para ir a dicha ciudad.

Con el conocimiento previo de las máquinas de coser, Jagger también estudió las ruletas del Casino de Montecarlo, dedicándole algunos días a su observación. Una vez encontrados ciertos defectos entre las ruedas y las ruletas, aprovechó su conocimiento para salir victorioso.

Utilizó parte de su dinero para contratar a seis personas, quienes acudieron a las mesas de juego del casino para jugar y anotar todos los números resultantes en cada juego de ruleta. La recopilación de datos fue fundamental.

Jagger hizo el estudio necesario y, tras días de observación, sacó resultados bastante interesantes: su estudio señaló que los números 7, 8, 9, 17, 18, 19, 22, 28 y 29 salían con una frecuencia mayor en comparación con el resto de cifras, encontrando cierta lógica por encima del propio azar.

Fue así que Jagger utilizó el dinero que le sobraba para intentar superar al casino y sacar una ganancia benéfica. Se trataba de un juego fundamental, pues era un esfuerzo por resolver su difícil situación económica y, de paso, exhibir su genio matemático.

Tras seis días de estudio, llegó la fecha histórica. La noche del 7 de julio de 1875, Jagger entró al Casino de Montecarlo y diseñó un plan perfecto para llevarse la victoria. Creyendo firmemente en su estudio, apostó a los números que eligió y sacó una ganancia considerable.

Su éxito fue tal, que François Blanc, quien se desempeñaba como director de la sala de juego, colocó una tela negra sobre la mesa y declaró que Jagger estaba “rompiendo el banco”, una expresión que significa que el jugador es capaz de agotar la reserva de una mesa de ruleta.

Al “romper el banco”, el Casino se veía en la obligación de tirar de los fondos para volver a financiarla. En cuatro días de juego, Jagger ganó el equivalente a 300 mil dólares.

Para el quinto día, se dio cuenta que estaba comenzando a perder, percatándose que el Casino Montecarlo intercambió la ruleta que ya tenía identificada. Una vez que se reencontró con la ruleta, jugó y ganó más de 450 mil dólares.

Después, Blanc se dio cuenta de todo lo que pasaba y el por qué la casa perdía tanto dinero. Sin embargo, poco se pudo hacer, más que esperar que Jagger se marchara con todas sus ganancias.

Sin duda alguna, Joseph se convirtió en una leyenda de la ruleta y de los casinos online. Con el dinero pudo recuperarse económicamente e incluso aprovechar para comprar propiedades.

Jagger no volvió a jugar en casinos, pero dejó un legado después de su muerte, al inspirar una canción y una película en la que se cuenta su inédita hazaña y victoria en Montecarlo.

Pero no solamente inspiró música y filmes, también despertó las alarmas de los casinos, al punto de que los proveedores de juegos de casino fueron más cuidadosos con las ruedas de sus ruletas, al hacer particiones móviles con el fin de evitar victorias tan bien calculadas como la de Jagger.