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La pandemia mundial generada por el covid-19 no ha hecho sino replantear el futuro de muchos establecimientos que antes de principios de 2020 contaban con una actividad muy específica que les funcionaba. El sector de los casinos físicos ha sido uno de los más castigados, pues la mayor parte de sus beneficios provienen de sus oportunidades de abrir su local.
Como esto no fue posible en Perú desde el mes de marzo hasta noviembre, muchas salas de juego tuvieron que idear alternativas para tratar de sobrevivir. Y no hablamos de las empresas más pequeñas con poco volumen de negocio y una cartera de clientes limitada, hablamos de algunos de los mejores casinos del país inca.
El Atlantic City Casino de Miraflores fue uno de ellos y probablemente el mejor ejemplo. Uno de los referentes en el juego peruano, con más de 26 años como líderes y con tablas suficientes como para poder afrontar toda clase de inconvenientes. Pero quizá este no, pues una emergencia sanitaria trastoca cualquier plan. Por eso es que en el seno de la factoría buscaron una solución. Y la encontraron.
Su plataforma web pasó de ser un simple directorio destinado a la promoción en la red, a convertirse en un casino online al uso. Fue necesaria una buena inversión para poner a disposición de los jugadores un buen catálogo de tragamonedas, juegos de mesa de casino (ruleta, blackjack, baccarat, etc.) y títulos de casino en vivo.
En poco tiempo, el portal del Atlantic City se convirtió en un lugar seguro y de garantías, capaz de llevar a cabo un servicio personalizado a sus visitantes. Además, implementó herramientas como los retiros mediante pago anticipado (de los más rápidos y efectivos del mercado), o como el sistema simulcasting para poder transmitir en streaming eventos deportivos en vivo.
Esto último quiere decir que no se cerró puertas y también optó por apuntar a las apuestas deportivas. Y poco a poco ha ido mejorando toda su red de entretenimiento en línea hasta volver a invertir otros 500.000 dólares más, casi dos millones de soles, en ello a finales de este año 2022. Una propuesta seria de cara al futuro.
Hay que recordar que hablamos de que Atlantic City Casino es muy completo como casino físico y que reporta las mejores sensaciones en el área metropolitana de Lima para aquellos que quieran acercarse a probar suerte en él. Ya sean visitantes a modo de turistas o lugareños interesados en las apuestas.
La pandemia y un cambio de paradigma
A raíz de esta nueva gran inversión online que ha hecho Atlantic City, los altos cargos que llevan la operación del casino no han tenido ningún problema en reconocer que su plataforma en la red es el camino por el que quieren transitar a partir de ahora, sin que eso pueda afectar negativamente a su salón físico de la capital del Perú.
La pandemia contrajo el negocio hasta el punto de que la facturación cayó en más del 80% a finales del 2020. Además, la llegada de la etapa de la nueva normalidad y restricciones parciales supuso un verdadero reto para salas de este tipo, que tenían que controlar mucho todo contacto de las personas con sus máquinas, así como el cumplimiento de la normativa covid.
A pesar de volver a reabrir, los aforos reducidos seguían en vigor junto a la incapacidad de ofertar comidas y bebidas en su restaurante. La cercanía con los jugadores peruanos fue decreciendo y eso también influyó para que se llevara a cabo una maniobra de salvación del casino. Fiar su recuperación al medio online.
Los resultados no han podido ser más positivos, pues el Atlantic Casino no solo está muy cerca de recuperar toda su facturación previa a la pandemia, sino que prevé superarla en un 50% de cara año 2023 gracias a este nuevo impulso millonario. La web digital ya supone un tercio de las ganancias del negocio y podría llegar hasta casi la mitad si se cumplen las estimaciones.
La empresa ha querido destacar que su intención no es la de llevar a cabo una línea publicitaria muy agresiva, con multitud de anuncios en sus juegos o en su plataforma. Su cometido es el de atraer a más jugadores, no solo los que ya eran habituales en su casino físico, y hacerlo a través una propuesta de valor.
Con ello también rehúye de una de las ideas durante los peores momentos de la crisis sanitaria, que no era otra que pedir créditos a las entidades bancarias peruanas. Algo a lo que han tenido que recurrir otras firmas y aun así algunas han terminado cerrando por la incapacidad de devolverlos y recuperar la normalidad.
Este híbrido entre casino físico y casino online es un modelo que se repite tanto en Europa, como en Estados Unidos, e incluso en otros países de Sudamérica, y que cada vez será más habitual si el contexto del juego sigue bajo las líneas empresariales actuales.
El casino peruano inspirado en la ciudad balneario de la costa del Atlántico de Nueva Jersey, y que precisamente si por algo destaca es por la gran cantidad y calidad de casinos, está más vivo que nunca. Y puedes jugar en él desde donde tú quieras.
